martes, febrero 07, 2006

Todo lo que puedo ser

Estaba sentado en mi escritorio, rodeado de revistas - son de la competencia, ni pienso nombrarlas - e intentando redactar. En un rato debería arrojar mi cuerpo al departamento de diseño, controlar que estén haciendo todo como se les ha pedido.
Un golpe me detuvo. La luz roja que ladra "AIRE" me obliga a retornar al piso, el mic está abierto y yo no estoy diciendo nada. Aunque siempre pienso eso, a pesar que me digan que es lo mío, que sirvo, que tire para adelante. Sin embargo es jodido reír, más lo es hacer pensar.
Pero me distraigo nuevamente, a través del vidrio lo veo al gordo que me hace señas. Tengo que apurarme, cortar el bloque y darle paso a la música.
Entonces siento el aire, ese aire que no sentía hace 7 años como mínimo. Las gotas de lluvia que atacan mi rostro. ¿Señal de advertencia? No lo sé, yo sigo tatuando la arena con mis pisadas.
La salitrosa costa me recibe, me baña y yo me sumerjo. Filtro y vuelvo. La lucha dura lo previsible y mi 6.6 rebelde se escapa de mi tobillo derecho al bajar de la primera ola en años.
Al regresar a la superficie, a otra realidad, no recuerdo cuando comencé a soñar. Cuando dejaré de ser un sueño y me convertiré en realidad. Me sonrío. Muchas cosas están en su lugar y otras en camino.
Me frego los ojos, miro el monitor. El celular en algún momento ha recibido un llamado.
¿Alguién me habrá visto dormir?

7 comentarios:

Unknown dijo...

Lo que decía brother, te acordaste. La espiral azul por la que nos caimos nunca nos va a liberar.
Eso que puse arriba suena muy rastafari -pelotudo- fuma verde, pero no es eso, ni moda, ni nada. El cuerpo tiene memoria. Un recuerdo tatuado por cada ola bajada, por cada cagazo sufrido en el borde de la rompiente.
Lo demás -la ropita, el pelito, la pose- es gilada.
Cordialmente,
Yo.

Nala dijo...

Quiza sea bueno dormir mas de noche :o)

Pareciera que el sueño refleja lo mismo que te pasaba: la falta de inspiración, tener que decir/escribir algo y que la mente se te haya bloqueado...

vinilica vegana dijo...

suerte con las olas,
que despejen ese cielo interior...

es lo mejor escaparse un toque...

m a dijo...

A mi me parece que la onda está en alcanzar la proporción justa entre ser sueño y realidad.
Y concuerdo con niño errante, el cuerpo tiene memoria ¿sabés por qué? por que no podemos aprender nada que no nos haya pasado por el cuerpo.

Juan Manuel Bruñol Silvani dijo...

errante: y precisamente, creo, que me subo a esa ola porque pienso que va a ser la ultima.

nala: el bloqueo, creo haberlo descubierto a esta altura, surje por una falta de confianza. Algo asi

elogiado: estoy de acuerdo. Bienvenido. Nos estamos leyendo

vinilica: a la perfección has entendido, Llueve puertas adentro.

marce: algo asi como soñarse despierto. Sigo en la busqueda

abrazo de gol

Unknown dijo...

Es la última ¿sino cómo te subirías?
Cordialmente,
Yo.

P.D: dos días antes de partir me agarró un deseo irrefrenable de juntar a toda la banda. Y sí, de imposibles vive uno.

Nala dijo...

Entonces me confirmas lo que no me animaba a asegurar, del significado del agua, la costa, la ola. Emerger a la superficie.
Superar esa falta de confianza y salir a flote.
Loco, no?